Torla Ordesa
Custodiada por la mirada del imponente macizo de Mondarruego y puerta de acceso al Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido; la villa destaca por sus paisajes de montaña, formados por cumbres que superan los 2000 metros de altitud, y por su arquitectura tradicional pirenaica.
Sus calles estrechas y empedradas nos revelan magníficos ejemplos arquitectónico, así como detalles y ornamentos: la plaza Mayor del siglo XIII, la torre-campanario de la iglesia, del siglo XVI; el castillo actualmente convertido en abadía y museo etnológico con pinturas medievales, las casas señoriales como Casa Oliván o Casa Viú,las fachadas con grandes portones, escudos infanzones y llamativos tiradores; los tejados de pizarra, las ventanas con arcos geminados, o las chimeneas troncocónicas, típicas del Pirineo.